Corriente marina, explosión de energía entre balbuceos
rotos. El sonido distante de aleteos pequeños y raquíticos. Suspiros entrecortados
y la sensación de que algo se queda a medio camino entre el sueño y la vigilia
plena. Piececitos diminutos que caminan por tu garganta y te hacen toser. La
tos que se hospeda como un monstruo invisible abrazándote el cuello. Te quiere,
pero de tanto amor ahoga. Sacudida intensa que centrifuga tus sesos, se licúan y
se escapan por tus orejas sobre el colchón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario